¿Por qué se elige este fluido corporal para el análisis? La recolección de muestras de orina de 24 horas es poco práctica e inconveniente. Un análisis de sangre de laboratorio realizado una sola vez no es nada indicativo: el cortisol puede aumentar bruscamente solo por la emoción antes de la extracción de sangre. Es poco probable que una sola prueba de cortisol en saliva pueda diagnosticar de forma fiable el estrés crónico, ya que diferentes personas tienen diferentes ritmos circadianos y las fluctuaciones de esta hormona pueden ocurrir en diferentes momentos[1].
El cortisol en la saliva es necesario medir al menos 3 veces al día, cada 8 horas. Esta medición mostrará con bastante precisión las fluctuaciones diarias reales de los niveles de esta hormona[2].
Consecuencias negativas del estrés crónico
Además del propio cortisol, el estrés emocional prolongado va acompañado de un aumento constante de los niveles de adrenalina en sangre y, a través de sus vías de señalización, afecta a la médula ósea, provocando la inflamación y el envejecimiento de las células madre. Como consecuencia, el estrés crónico tiene un efecto negativo en diversas funciones del organismo:
- El estrés emocional reduce los niveles de la hormona de la longevidad Klotho, que puede causar atrofia cutánea, arteriosclerosis, osteoporosis y, en general, acortar la esperanza de vida[3].
- Las hormonas del estrés emocional (adrenalina, cortisol, norepinefrina) suprimen muchos mecanismos de defensa en los humanos. Por ejemplo, el factor regulador Nrf2, que protege contra la glicación de las proteínas y, por tanto, contra las arrugas, el daño endotelial vascular y el desarrollo de la aterosclerosis[4].
- El estrés emocional conduce al aumento de peso[5].
- Existe evidencia científica que sugiere que el estrés emocional puede desencadenar la enfermedad de Parkinson. Cabe destacar que los remedios que reducen el nivel de estrés y depresión (por ejemplo, el café) también previenen la enfermedad de Parkinson. Además, cada vez hay más consenso en los círculos médicos de que la depresión que produce el estrés crónico es una fase temprana de la enfermedad de Parkinson[6].
- El estrés emocional puede ser causa de una amplia gama de enfermedades crónicas no transmisibles (infarto de miocardio, accidente cerebrovascular, cáncer, diversas enfermedades respiratorias y diabetes)[7].
Prevención y tratamiento del estrés crónico
A continuación solo se presentarán los métodos que han demostrado su eficacia en ensayos clínicos controlados aleatorios (ECA):
- Terapia de luz: la exposición de los ojos a una luz brillante de determinada duración (más frecuente realizada en las horas de la mañana) mediante lámparas de alta luminosidad[8][9][10][11][12][13].
Esta terapia de luz se realiza de forma ambulatoria: los dispositivos domésticos diseñados para este fin fácilmente pueden adquirirse en Internet. Algunos de estos dispositivos incluso han sido investigados en ensayos clínicos[14]. - El masaje para el estrés y la depresión aumenta en un tercio la serotonina y la dopamina en la orina, y al mismo tiempo reduce los niveles de cortisol en un 31%[15].
- La meditación es el método más difícil, pero también el más efectivo para combatir el estrés y la depresión. La meditación suprime los efectos negativos del estrés emocional a nivel hormonal, al tiempo que calma a la persona, optimiza su estructura cerebral y prolonga la vida. Puede leer más sobre la meditación, sus efectos inhibidores en el estrés y las pruebas científicas de la efectividad de la misma en nuestro artículo ampliado.
- El sexo regular juega un papel muy importante en la prevención del estrés y la depresión[16][17].
- La actividad física aeróbica (correr, nadar, etc.) tiene un efecto positivo enorme en el tratamiento de la depresión y la prevención del estrés emocional[18][19][20].
- El consumo de café está inversamente correlacionado con la depresión y el deterioro de la memoria. La cafeína, como un antagonista de los receptores de adenosina A2A (A2AR), proporciona una neuroprotección fiable, aunque a corto plazo, contra el estrés crónico[21].
- El consumo diario de 300 mg de extracto de raíz de ashwagandha durante dos meses reduce los niveles de cortisol en un 20%[22].